Las Biomasas

El término biomasa se introdujo para indicar todos aquellos materiales de origen orgánico (vegetal o animal) que no han sufrido ningún proceso de fosilización y que se emplean para la producción de energía.
Las biomasas forman parte de las fuentes renovables ya que el CO2 emitido para la producción de energía no representa un aumento del anhídrido carbónico presente en el medioambiente, sino que es el mismo que las plantas han absorbido antes para desarrollarse y que a su muerte volverá a la atmósfera mediante los procesos normales de degradación de la sustancia orgánica. El empleo de las biomasas acelera el retorno del CO2 a la atmósfera dejándolo nuevamente disponible para las plantas. En la práctica estas emisiones vuelven al ciclo normal del carbono y están en equilibrio entre el CO2 emitido y el absorbido.
La valorización energética de los materiales orgánicos contribuye a la producción de energía térmica y las instalaciones de tamaño mediano a grande pueden producir también energía eléctrica, contribuyendo a limitar las emisiones de anhídrido carbónico y, por lo tanto, cumpliendo con los compromisos del Protocolo de Kyoto.